Pueblos indígenas, los más vulnerables frente a las drogas
Muchos de los jóvenes viven bajo las reglas del consumo de bazuco en el resguardo de Agua Bonita.
Desde hace mucho tiempo, las comunidades indígenas en el Guaviare buscan hacerle frente al consumo de drogas dentro de sus familias.
Frente al confinamiento y cercado de su territorio, hoy los NUKAK lidian una nueva batalla, muchos de sus jóvenes viven bajo las reglas del consumo de bazuco en el Resguardo Aguabonita de San José del Guaviare. “Queremos que nos ayuden” dice Joaquín, un vocero de la comunidad que junto a otros jóvenes de la comunidad guayarimuno protestaron ante Urgencias de San José del Guaviare, donde voluntariamente más de 10 jóvenes nukak accedieron a recibir tratamiento para su rehabilitación, pero la atención en salud demoró tanto que muchos de ellos empezaron a abandonar el centro de salud.
Actualmente la crisis humanitaria y social reduce cada vez más a la población nukak, donde muchos de sus jóvenes son presa de bazuco e incluso han terminado atacando a sus progenitores con armas blancas por impedirles el consumo de esta sustancia.
